"Elena metió todo ahí dentro. Todo menos la ropa; la ropa no pudo, conservaba su olor, el olor de su hija. La ropa siempre conserva el olor que tuvo en vida el muerto."
Poco después de que Rita aparece muerta en la iglesia que suele frecuentar, la investigación se da por cerrada, y su madre es la única que no renuncia a esclarecer el crimen. Pero jaqueada por la enfermedad, es también la menos indicada para encabezar la búsqueda del asesino.
Hoy vengo a hablarles de esta novela corta, o nouvelle, como más les guste llamarla. Elena sabe de Claudia Piñeiro solo cuenta con 176 páginas pero en esas páginas nos regala una historia increíble.
Una mujer que a sus 63 años ya no es dueña de su cuerpo. Su cerebro que supo ser rey, fue destronado, y ahora quien la gobierna es esta puta enfermedad de Parkinson. Los días de Elena se dividen entre las pastillas de levodopa que debe tomar para poder, aunque sea, dar dos pasos con dificultad.
Elena quiere saber quién mató a su hija, porque todos le dicen que se suicidó. Pero Elena sabe que Rita, su hija, no podría suicidarse. No en un día de lluvia. No con tormenta eléctrica. Por eso Elena, peleando contra su cuerpo gobernado por esa enfermedad, va a hacer lo imposible por esclarecer lo que le pasó a Rita. Y por ello recurre a Isabel, una mujer que vio una sola vez en la vida, hace ya 20 años, pero que Elena sabe que puede ayudarla.
Claudia Piñeiro entrelaza así las historias de tres mujeres, Elena, Rita e Isabel. Tres mujeres que tienen mucho y poco en común.
Elena sabe nos habla de la maternidad y de las diferentes maneras que existen de ser madre. De la maternidad no deseada y lo que ello implica. De volverse madre de tu madre, cuando el cuerpo de ella la abandonó. De lo que es ser una madre sin hija. ¿Se es madre si una no tiene más a su hija?
"Elena dio dos pasos y el Padre Juan estuvo a punto de cerrar la puerta pero antes dijo, ay, Elena, Elena, me olvido que usted es una madre. Ella no lo mira pero se detiene y dice, ¿soy una madre, Padre?, ¿por qué lo duda?, ¿qué nombre tienen las mujeres a las que se les murió un hijo?, no soy viuda, no soy huérfana, ¿qué soy? Elena lo espera en silencio, frente a él pero de espaldas, y antes de que responda dice, mejor no me ponga un nombre, Padre, tal vez si usted o su iglesia encuentran una palabra para nombrarme, después se arroguen el derecho de decirme como tengo que ser, cómo tengo que vivir. O morir."
A través de esta historia la autora nos habla de vivir en un cuerpo del cual no sos más dueño. Lo habla a través de una mujer que debió llevar un embarazo hasta el final sin desearlo, un parto sin quererlo y tener que criar a una hija sin amarla. También lo habla a través de la famosa enfermedad de Parkinson. Lo peor de esta enfermedad que padece Elena no es el deterioro de su cuerpo, sino el estar conciente de ello. Estar lúcida a la hora de querer levantar un brazo y no poder hacerlo, de querer tomar agua de un vaso y que le sea imposible. Pero esta enfermedad es la que la lleva hasta Isabel, lo que significará, al final de todo, descubrir la verdad de lo que le pasó a su hija.
Una historia más que recomendable, donde Claudia Piñeiro no recurre a palabras difíciles ni eufemismos para hablar de la vida, la muerte, el Parkinson. Un thriller que da realmente escalofríos por lo cercano que puede resultar. Piñeiro escribe como si nos estuviera narrando de manera oral esta historia, deja fluir y nos atrapa con sus palabras. Es el primer libro que leo de la autora pero dudo que sea el último. Sencilla y profunda, que se te cuela por los huesos y te hace sentir. Así vivi esta historia.
Los leo ♥
Les recuerdo que pueden encontrar este y otros libros de Claudia Piñeiro en la página de Me gusta leer.
Sobre la autora
Claudia Piñeiro nació en el Gran Buenos Aires en 1960. Es escritora, dramaturga, guionista de TV y colaboradora de distintos medios gráficos. Ha publicado las novelas Las viudas de los jueves, que recibió el Premio Clarín de Novela 2005; Tuya (Alfaguara, 2005); Elena sabe, Premio LiBeraturpreis 2010 (Alfaguara, 2007); Las grietas de Jara, Premio Sor Juana Inés de la Cruz 2010 (Alfaguara, 2009); Betibú (Alfaguara, 2011); Un comunista en calzoncillos (Alfaguara, 2013); Una suerte pequeña (Alfaguara, 2015); Las maldiciones (Alfaguara, 2017) y el libro de cuentos Quién no (2018), además de relatos para niños y obras de teatro. Por su obra literaria, teatral y periodística, ha obtenido diversos premios nacionales e internacionales, como el Premio Pepe Carvalho del Festival Barcelona Negra y el XII Premio Rosalía de Castro del PEN (Club de Poetas, Ensayistas y Narradores de Galicia), que distingue anualmente la trayectoria literaria de cuatro autores relevantes en lengua portuguesa, castellana, catalana y vasca. Varias de sus novelas han sido llevadas al cine. Es una de las escritoras argentinas más traducidas a otros idiomas, lo que hace que sus libros sean leídos y disfrutados por miles de lectores en todo el mundo.